El Marketing de Guerrilla supone un conjunto de estrategias que utilizan la metáfora militar para diseñar una estrategia de negocios.
Estas estrategias buscan debilitar al enemigo a través de una larga serie de ataques menores más que comprometerse en una gran batalla.
La fuerza de las estrategias de guerrilla reside en dividirse en pequeños grupos que atacan de forma selectiva el objetivo en sus puntos más débiles. Para ser efectivas deben ser capaces de replegarse entre ataque y ataque.
La forma genérica consiste en una secuencia repetida de ataques y retiradas y ocultaciones en serie.
Las estrategias de guerrilla nunca ganan las guerras ya que son sus adversarios los que generalmente las pierden.
Las principales fortalezas de las estrategias de guerrilla son:
Preservan sus recursos ya que nunca atacan de forma directa al enemigo.
Flexibilidad ya que se pueden adaptar a situaciones de defensa como de ataque.
Ejemplos del Marketing de Guerrillas son:
- Ataques dirigidos legalmente contra la competencia
- Publicidad comparativa de producto
- Alianzas de corta duración con competidores
- Reducciones selectivas de precios
- Publicidad negativa contra un competidor
- Sabotaje deliberado de investigaciones de mercado, campañas u otras acciones de Marketing.
El termino Marketing de Guerrilla también es utilizado para referirse a métodos poco ortodoxos.